Según ha explicado el propio artista a Periódico de Ibiza y Formentera durante algo menos de un mes, hasta el próximo 6 de julio, se podrán ver piezas muy diversas que corresponden a sus últimas creaciones.

Así, por ejemplo, entre las pinturas habrá cuadros en formatos grandes, medianos y pequeños elaborados en papel y lienzo con técnica mixta y con una temática en la que las calles, los puertos y las gentes de Ibiza vuelven a jugar un papel muy importante. Sin embargo, Zabala ha dado un paso más y ha decidido dejar aparcados los tonos claros y los blancos y negros que durante años han caracterizado su trayectoria para apostar por colores más potentes e, incluso tirando a flúor, introduciendo el espray y el acrílico.

Además, el visitante podrá encontrar piezas elaboradas con la técnica del collage, elaborado con cartones, papeles de periódico y cartulinas de vivos colores que el propio artista murciano emplea «para añadir toques de color más que para conseguir formas».

Por otro lado, otra parte importante de la exposición estará compuesta por sus originales y sorprendentes esculturas elaboradas con malla de alambre. En este caso, Zabala presentará en Can Tixedó figuras de animales como un perro, un gato, una abeja o una que hace referencia a Ícaro, personaje fundamental de la mitología griega y que el artista asocia mucho con Ibiza «ya que en su empeño de escapar del famoso laberinto del Minotauro acabó cayendo sobre una isla del Mediterráneo».

Mucho trabajo gracias a Art amb B

Ángel Zabala ha asegurado a este periódico que actualmente vive un momento laboral muy dulce gracias en buena medida al trabajo que hace la asociación Art amb B con Antoni Torres Martorell. «En los últimos meses he participado en varias exposiciones colectivas por la Península con bastante éxito gracias en buena medida a la Fundació Baleària y al trabajo incansable de Torres Martorell al que le debemos mucho los artistas de Baleares».

De hecho, mientras tiene pendiente inaugurar una nueva exposición individual en distintos lugares de la Península y de Baleares, el pintor y escultor puede presumir de haber expuesto su impactante escultura Nit Mediterrànea en la que llama la atención «sobre el drama de las miles de personas que inician una aventura vital sin saber cual será el final de su viaje» en el Museo de los Naufragios de la lonja vieja de la localidad gallega de Camariñas, en plena Costa da Morte, en la Estación Marítima de Denia, la Torre dels Ducs de Medinaceli de la localidad alicantina de El Verger y en la sede de la Universitat de les Illes Balears de Palma, donde recibió más de 2000 visitas en apenas 15 días.